En una época no tan lejana, se jugaban torneos nocturnos de futbol comercial. Habia equipos que representaban a algunos negocios, como La Viruta, o La Harina, o barriales como La Chacarita o El Porvenir. En estos equipos jugaban aficionados y también algunos ex-jugadores de los clubes locales, en muchos casos con un considerable exceso de peso. La gente del pueblo asistía a ver los partidos y era muy común escuchar bromas y cargadas, desde y hacia los jugadores.
En este caso recordamos al Torta, quien habia jugado anteriormente en uno de los clubes el pueblo, pero ahora exhibia una pobre condicion física, durante un partido, le tiran una pelota larga y El esforzándose no logra acortar la distancia con la pelota, manteniéndose casi a la misma distancia, cuando desde la oscuridad de la noche se escucha un grito:
- PISALE LA COLA!!
Este detiene su carrera, y volviendo la vista hacia el sector del alambrado desde donde partió el grito, contesta con un insulto, y suelta una carcajada que es compartida por el resto de los jugadores y parte del público.
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